Sankaly - Moratalaz

Es verdad que este sitio tiene sus incondicionales y clientela paisana , claro está. Pero lo cierto es que se debe haber dormido en los laureles hace tiempo. El arroz que tomé bastante pasadillo y como antiguo. Colorantes?? No me gustó. El menú es carillo para lo que hay un poco más abajo o más arriba y no es nada del otro mundo. Y el ambiente, decoración, iluminación son como de los setenta, un poco deprimentes. Esto estaría bien si la calidad fuera de verdad casera como dicen, pero a mí no me lo pareció. La barra bien, pero irregular.

Por no hablar de si pides carta o su paella, realmente magnifica, su menu del dia ofrece una calidad insuperable para un precio de 13 €. Baste decir que su carne del plato del dia se puede pedir poco hecha y la puedes cortar como mantequilla. Si la pides de carta, de las mejores que he probado en corte y calidad, y he llevado a mas de 2 y 3 amigos. Y lo mismo para el pescado: estupenda merluza. El vino tampoco desmerece, te serviran un rioja o un rivera con el menu del dia, pero eso si, a cambio no esperes que te pongan una botella, como si fuera vino a granel. De los pocos que son capaces de mantener la calidad todos los dias, y es que el que sigan saliendo a comprar el producto y lo elijan en funcion de la calidad se nota. Mis felicitaciones a este negocio familiar.

Nada más entrar te das cuenta de que no vas a querer comer allí, el olor a fritura mala está en el ambiente desde primera hora de la mañana. Entramos a tomar café, con intención de, al regresar por la noche, cenar y solo por ver algunos bichitos tras la máquina te quedas para atrás, así como el café aguado. Pesimo.

Ambiente familiar, menú algo superior a la media, tanto en precio como en calidad, pero merece la pena.

Llevo años visitando este restaurante y creo que eso es lo mejor que se puede decir de un sitio. A pesar de los años transcurridos siguen teniendo una calidad excepcional, tanto en el producto base como en la cocina. Y nunca ninguno de los amigos que he llevado ha salido defraudado a pesar de que se lo había puesto antes por las nubes. Claro que todo depende de lo que aprecies. Si buscas estilismo en vez de una carne que se corta como mantequilla, este no es tu sitio. Sin embargo, si buscas comer bien y prescindes del entorno y te interesa sobre todo la calidad y la atención, no dejes de ir.